El prolapso de órganos pélvicos es una condición mucho más común de lo que se cree y afecta a mujeres de todas las edades. Aun así, sigue siendo un tema poco hablado, cargado de dudas y, a veces, preocupación.
Como fisioterapeuta especializada en uroginecología, mi objetivo es acompañarte, informarte y ayudarte a recuperar tu calidad de vida mediante tratamientos basados en la evidencia científica.
Por Rosalie · Fisioterapeuta especializada en uroginecología, hipopresivos y pesarios

Rosalie Broens
Fisioterapeuta especializada
¿Qué es exactamente un prolapso?
El prolapso de órganos pélvicos ocurre cuando una o varias estructuras internas —como la vejiga, el útero o el recto— descienden de su posición natural debido a la debilidad o disfunción del suelo pélvico, que es el conjunto de músculos y tejidos que sostienen estos órganos.
Existen varios tipos de prolapso:
- Cistocele: descenso de la vejiga.
- Rectocele: descenso del recto.
- Histerocele: descenso del útero.
- Uretrocele: descenso de la uretra.
- Enterocele: descenso del intestino delgado.
Los síntomas más frecuentes incluyen:
- Sensación de presión o peso en la vagina.
- Notar un bulto o masa a nivel vaginal.
- Dolor o molestias al estar mucho tiempo de pie.
- Incontinencia urinaria o dificultad para vaciar completamente la vejiga.
- Estreñimiento o dificultad en la evacuación.
- Molestia o disminución del placer durante las relaciones sexuales.
El prolapso no es peligroso, pero sí puede afectar mucho tu bienestar diario. Y lo importante es que tiene tratamiento.
¿Por qué aparece el prolapso?
Aunque el prolapso puede tener múltiples causas, las más habituales son:
- Embarazo y parto vaginal
- Menopausia y cambios hormonales
- Debilidad muscular por sedentarismo
- Cirugías ginecológicas previas
- Toser habitualmente o tener estreñimiento crónico
- Levantar cargas de manera repetida
- Predisposición genética
Conocer el origen permite crear un plan de tratamiento más efectivo.
¿Cómo puede ayudarte la fisioterapia uroginecológica?
La fisioterapia es el tratamiento de primera elección en la mayoría de los prolapsos leves y moderados, e incluso en prolapsos más avanzados puede mejorar síntomas y evitar que sigan progresando.
✔️ Evaluación completa del suelo pélvico
Incluye fuerza muscular, tensiones internas, postura, patrón respiratorio, movilidad de pelvis y abdomen, hábitos y estilo de vida.
✔️ Ejercicios personalizados (más allá de los Kegels)
Cada caso es único. Utilizamos ejercicios específicos para:
- Mejorar el tono y la fuerza del suelo pélvico
- Coordinar respiración y abdomen
- Reducir presiones internas
- Entrenar movimientos cotidianos de forma segura
✔️ Hipopresivos
Indicados para mejorar la postura, activar el core profundo y disminuir la presión sobre los órganos pélvicos.
✔️ Técnicas manuales
Movilización de tejidos, liberación de tensiones internas y trabajo sobre diafragma, pelvis y abdomen.
✔️ Uso y adaptación de pesarios
Son dispositivos que se colocan en la vagina y ayudan a sujetar los órganos para mejorar síntomas.
Como fisioterapeuta especializada, puedo evaluar, adaptar y enseñar su uso de forma segura.
✔️ Reeducación de hábitos
Aprender a gestionar cargas, mejorar el tránsito intestinal, evitar malas posturas y crear rutinas saludables es clave para la recuperación.
¿Cuándo debo acudir al fisioterapeuta?
Deberías consultar cuando notes:
- Presión o “peso” vaginal
- Aparición de un bulto
- Cambios urinarios o intestinales
- Molestias al estar mucho rato de pie
- Dolor pélvico
- Dificultad para hacer deporte sin molestias
Cuanto antes se evalúe, mejor respuesta tendrá el tratamiento.
¿Se puede prevenir el prolapso?
Sí, en muchos casos. Algunas recomendaciones generales son:
- Evitar el estreñimiento
- Trabajar suelo pélvico y abdomen de forma correcta
- No aguantar la respiración al hacer esfuerzos
- Practicar hipopresivos o ejercicios guiados por un profesional
- Cuidar la postura
- Consultar tras un parto, aunque no haya síntomas
Conclusión
El prolapso es una condición común, tratable y que no debería vivirse en silencio.
Con una valoración adecuada y un tratamiento fisioterapéutico completo, es posible reducir síntomas, mejorar la calidad de vida e incluso evitar que avance.
Si crees que puedes tener un prolapso o buscas una evaluación profesional, estaré encantada de ayudarte.
Un saludo,